El gobierno central de China estableció metas ambiciosas para salvaguardar la calidad del agua en 2011, al inicio del 12° Plan de cinco años (2011-2015). Apuntaba a mejoras desde la fuente hasta el grifo, identificando un presupuesto de casi 700.000 millones de RMB (USD 112.000 millones) para pagar por actualizaciones al tratamiento del agua y los sistemas de tuberías. Los fondos se han distribuido a lo largo de múltiples ministerios y entidades gubernamentales de alto nivel, incluyendo el Consejo De Estado, la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, el Ministerio de Recursos Hídricos, el Ministerio de Protección al Medio ambiente, el Ministerio de Vivienda y Desarrollo Urbano y Rural, y el Ministerio de Salud.
Grandes metas
En forma separada, también había un movimiento para elevar y estandarizar los diversos niveles de calidad del agua potable en las provincias, introduciendo un nuevo estándar nacional. En 2007, se introdujo un nuevo Estándar Nacional de la calidad del agua potable (GB 5749-2006). Este estándar está en conformidad con los estándares nacionales, pero desde que la valla fue puesta muy por encima de los niveles actuales de calidad del agua de China, tan solo entró en vigencia en julio de 2012. El gobierno espera que las ciudades a lo largo de China cumplan con este estándar nacional para 2015.
El año 2015 ya está aquí. ¿Cuán lejos ha llegado el gobierno de China en cumplir con sus metas de seguridad de agua?
En 2010, más de 600 millones de residentes urbanos ya disfrutaban del acceso a los servicios de suministro de agua y más de 400 millones residentes rurales tenían acceso a agua potable limpia. Esto se debió principalmente a las mejoras lideradas por el gobierno en cuanto a iniciativas de suministro de agua y agua potable segura. Sin embargo, 298 millones de chinos que viven en zona rurales no tenían agua potable segura. Iban a obtener suministros durante el Plan 2011-2015. Para los residentes urbanos, la tasa de penetración anunciada del suministro público de agua iba a aumentar de 90% a 95%.
Calidad cuestionable
Aunque es claro que más personas a lo largo de China están disfrutando del acceso al suministro público del agua, lo que no queda claro es la calidad del agua que se ofrece. La evaluación a mediano plazo del 12º Plan del año fiscal, que comenzó a mediados de 2013, podría tener las respuestas. No obstante, el informe de evaluación es “clasificado” y todavía no está a disposición del público.
A raíz del ‘Plan de acción de prevención y control de la contaminación del agua’ anticipado, que prioriza la seguridad del agua potable, China Water Risk y chinadialogue han observado más de cerca el estado real del agua potable en zonas urbanas y rurales en China. El informe señala que todavía no se puede confiar en la calidad del agua de algunas zonas urbanas, mientras que las zonas rurales se enfrentan a muchos desafíos para cumplir con los requerimientos que son menos rigurosos que en las zonas urbanas.
El informe entero, que estipula los problemas de la protección de las fuentes de agua, el financiamiento del agua y la gobernabilidad del agua, El largo recorrido de China hacia el agua potable segura, se espera que sea publicado a fines de este mes.
El agua potable se encuentra al final de la cadena de suministro del agua. Se dice que para lograr una alta calidad de agua potable, se requieren normas integrales, políticas y regulaciones implementadas que gobiernen toda la cadena de suministro desde la fuente hasta el grifo. La protección de las fuentes de agua estaba incluida en el ambicioso plan de China de salvaguardar el agua potable segura en el 12º Plan del año fiscal y los objetivos establecidos tanto para 2015 y 2020.
Para el tratamiento del agua y la gestión de la red de la tubería principal, China está estancada en un camino ‘enfocado en la tecnología’ y está observando la inversión en infraestructura e innovación de alta tecnología para garantizar la calidad y la entrega del agua.
Sin embargo, los problemas persisten en el suministro secundario del agua al usuario final, lo que tiene el mayor impacto directo en la calidad del agua del grifo. A pesar de la gran cantidad de intentos a lo largo del país para abordar este tema, todavía no existe una solución perfecta.
Éxito a nivel macro
Muchos empleados que manejan información confidencial con acceso a los datos e informaciones sobre la calidad del agua a nivel ministerial y departamental, comparten una visión común con respecto a los problemas del agua en China.
Dicen que en las capitales de provincia y las grandes ciudades de las regiones costeras desarrolladas del este, la seguridad del agua “esencialmente no tiene problemas”. En ciudades de segundo y tercer nivel, así como en pueblos medianos a pequeños, el desarrollo de la seguridad del agua es irregular, pero ha estado mejorando. En las zonas rurales, ha habido un rápido progreso con el suministro colectivo del agua. Los problemas con los “tres grandes”, a saber, las altas concentraciones de flúor, arsénico y sal que se encuentra en el agua de algunas zonas rurales, han sido resueltos en gran medida. Mientras tanto, también están progresando las obras de mejora del agua potable rural para contener la contaminación.
En este retrato del panorama de seguridad del agua potable de China, las mejoras de la calidad del agua han estado irradiándose desde las grandes ciudades hacia ciudades y pueblos más pequeños. En realidad, sin embargo, la información sobre las áreas rurales sigue siendo limitada; el panorama del agua en las zonas rurales está envuelto en la niebla.
Además, más allá de esta visión general tan positiva a nivel macro de la seguridad del agua potable de China, a nivel local el verdadero estado de la seguridad del agua en cada ciudad, pueblo o comuna no es clara. La divulgación de información oficial sobre la calidad del agua es mala y el gobierno conserva las pruebas oficiales y los datos de monitoreo en secreto. Aunque las empresas de suministro de agua han estado publicando sus datos de prueba de la calidad del agua, hay espacio para mejorar la frecuencia de las pruebas, la cantidad de indicadores publicados y las interfaces públicas.
Inquietudes locales
Contra estos antecedentes, los grupos de la sociedad civil han recurrido a hacer sus propias pruebas al agua potable para obtener datos sobre la calidad del agua. Un informe reciente de la Fundación de la seguridad del agua en China demuestra que solo la mitad de las 29 ciudades de tamaño grande y mediano a las que se encuestó, pasaron la prueba de los 20 indicadores seleccionados por la Norma nacional de agua potable; una ciudad desaprobó la prueba en 4 indicadores. Los resultados de esta prueba, junto con todas las demás acciones de monitoreo cívico, no ofrecen una imagen integral de la seguridad del agua potable, pero son suficientes para resaltar los riesgos y desafíos que están por presentarse.
Las implicaciones de salud y medio ambiente del agua insegura ya son evidentes. En ciertos casos, los impactos sobre la salud tienen causas geológicas debido al flúor, arsénico y sal que se dan de forma natural. Pero en todos los demás casos, son el resultado de la contaminación y la actividad humana.
En años recientes, los Contaminantes Orgánicos Persistentes (COP), las hormonas medioambientales y otros contaminantes orgánicos tóxicos han sido detectados en el agua potable, generando una preocupación pública generalizada. Estas sustancias químicas todavía no se están monitoreando eficazmente, en parte porque no se ha llevado a cabo suficiente investigación sobre los impactos de la salud cuando se absorben a través del agua potable.
Como señala el informe, se tiene que abordar muchos obstáculos en el largo recorrido de China hacia el agua potable segura. China se enfrenta a problemas de propiedad ambigua, mecanismos de fijación de los precios del agua que no son claros, mecanismos inmaduros del mercado y una falta de modelos comerciales rurales, entre otros temas. También hay desafíos de gobernabilidad con responsabilidades dispersas y superpuestas entre varios departamentos a lo largo de los ministerios.
Dada la situación actual de los “nueve dragones que gestionan el agua“, muchas personas están esperando ver reformas a los sistemas administrativos del gobierno para la gestión del agua. Esto significaría establecer un mecanismo de gestión y coordinación del agua a lo largo de diferentes organismos gubernamentales. Claramente, se requiere un sistema de monitoreo del agua potable tanto a nivel nacional como local, al igual que un marco lógico tecnológico de la calidad del agua desde la fuente hasta el grifo, supervisión y sistemas de advertencia temprana y una gestión hidrológica integrada. El informe sugiere que estas necesidades deben abordarse en el próximo ‘Plan de acción de prevención y control de la contaminación del agua’.
Sírvase prestar atención al informe completo “El largo recorrido de China hacia el agua potable segura”, de China Water Risk y chinadialogue. Se espera que sea publicado en Internet para su descarga gratuita a fines de febrero de 2015, tanto en idioma chino como en inglés.
Este articulo fue publicado primero en chinadialogue.net