¿El mundo podría tener una nueva fuente de aceite de palma sostenible? Sí y no, de acuerdo con un estudio que establece que plantar el controvertido cultivo en pastizales es el camino a seguir.
Muchas plantaciones de palma aceitera se cultivan en tierras que anteriormente tenían densos bosques tropicales. Esto es malo para la limitación del cambio climático, ya que libera reservas de carbono de los árboles y los suelos. También es una amenaza para los orangutanes y otras especies forestales. Como resultado, el aceite de palma, utilizado en todo, desde alimentos hasta combustibles, tiene una mala reputación a nivel medioambiental.
Es una oportunidad para que el sector colombiano de la palma aceitera se diferencie de la palma aceitera asociada con la deforestación
Pero no es así en Colombia. A partir de la década de 1940, el país latinoamericano ha cultivado palmas oleaginosas en pastizales utilizados anteriormente para criar ganado. Y, tal vez no sea sorprendente, esto reduce la huella de carbono del aceite de palma.
“Esta es una antigua tierra agrícola que no involucra la deforestación directa”, dice Juan Carlos Quezada, ecólogo del Instituto Federal Suizo de Tecnología en Lausana, quien dirigió el estudio. “Es una oportunidad para que el sector colombiano de la palma aceitera se diferencie de la palma aceitera asociada con la deforestación. No es justo poner todas las fuentes de palma aceitera en la misma canasta”.
¿Sabías que...?
El ciclo de vida promedio de un árbol de aceite de palma es de entre 25 y 30 años
El equipo de Quezada examinó seis parcelas de tierra donde las palmas de aceite habían crecido durante décadas en Los Llanos (o “las llanuras”), una enorme pradera tropical que se extiende hasta Venezuela. Los árboles de aceite de palma suelen vivir entre 25 y 30 años antes de ser reemplazados por los agricultores. Después de excavar 50 cm, los investigadores analizaron el contenido histórico de carbono en el suelo. Descubrieron que el primer lote de árboles había eliminado grandes cantidades de carbono (alrededor del 40%) del suelo. Pero esto se reponía a medida que los troncos, ramas, hojas y raíces de los árboles muertos se descomponían, y el carbono se hundía nuevamente en el suelo.
Al mismo tiempo, las palmas, con su mayor biomasa, han fijado carbono cinco veces más que en las tierras de pastoreo. En conjunto, estos factores significan que, a largo plazo, el carbono almacenado en el ecosistema era prácticamente idéntico a antes de que se introdujera la palma aceitera.
El estudio, publicado en la revista Science Advances, argumenta: “La conversión de pasturas en la palma aceitera puede ser una oportunidad para preservar e incluso aumentar el secuestro de carbono en los trópicos y reducir la gran huella de carbono del desarrollo de la palma aceitera en tierras boscosas”.
El estudio es el primero en analizar el impacto de la palma aceitera en dos ciclos de plantación, de unos 50 años, dice Quezada. Además, confirma que el aceite de palma de Colombia es mucho menos dañino para el medio ambiente que el de las plantaciones en el sudeste asiático, agrega. En la isla indonesia de Sumatra, se ha calculado que la tala de bosques tropicales para cultivar palmas de aceite libera 174 toneladas de carbono por hectárea.
Alexandre Buttler, otro investigador del Instituto Federal Suizo que trabajó en el proyecto sugiere que la estrategia colombiana podría replicarse en otro lugar. Los principales países productores de aceite de palma tienen grandes pastizales abandonados que podrían reconvertirse, asegura.
Pero la situación no es tan simple como parece, dice Rory Padfield, un experto en palma aceitera de la Universidad de Leeds, en el Reino Unido: “En cuanto a la economía política del aceite de palma, simplemente no funciona así. Hay toda una serie de otras preguntas que deben considerarse”. Una es la gestión de la tierra. La propiedad de muchas tierras en los trópicos está en disputa. Incluso las llamadas plantaciones verdes colombianas se han relacionado con el desplazamiento de la población rural por parte de las grandes empresas de agronegocios a raíz del conflicto de décadas entre la guerrilla y el gobierno.
Hay muchas tierras agrícolas degradadas en Indonesia, el mayor productor mundial de aceite de palma dice Padfield. Pero sería ingenuo esperar que los desarrolladores rechacen la oportunidad de talar y vender árboles, antes de explotar la tierra recién limpiada para la palma aceitera. En Malasia, el segundo mayor productor mundial de aceite de palma, hay pocos pastos disponibles para su utilización, agrega.
Como un producto global, el comercio y la producción de aceite de palma son volátiles e impulsados por preocupaciones más que ambientales. Recientemente, India comenzó a importar nuevamente productos de Malasia, tras el boicot de un mes después de los comentarios del primer ministro de Malasia sobre Cachemira. Indonesia ha respondido a los esfuerzos de la Unión Europea para eliminar el aceite de palma en el biodiésel de los vehículos en el marco de un plan para aumentar el uso en sus propios suministros de combustible de transporte nacional. Mientras tanto, China ha aumentado las importaciones de aceite de palma en los últimos meses después de prohibir los suministros de soja de los Estados Unidos.
Este artículo fue publicado originalmente en China Dialogue