La implementación del Acuerdo de París no es el único tema en agenda para el gobierno de Mauricio Macri en la COP23 de cambio climático. Argentina asumirá pronto la presidencia del G20 y el rol que tendrá el clima en la agenda es uno de los ejes de discusión durante las dos semanas de la cumbre en Bonn, Alemania.
Argentina buscará avanzar en la creación de un grupo de sustentabilidad climática bajo el G20, eliminando la unión entre clima y energía bajo el mismo grupo de trabajo realizada por Alemania, el país que actualmente preside el grupo. El foco será cambio climático bajo una mirada de desarrollo sustentable.
“El nombre de la agenda en el G20 será desarrollo sustentable. La ratificación de los compromisos del Acuerdo de París y la tendencia y la claridad en la reducción de las emisiones van a ser ejes claves de nuestra presidencia”, sostuvo a Diálogo Chino Sergio Bergman, ministro de ambiente y desarrollo sustentable de Argentina.
Además de priorizar clima al crear un grupo específico, Argentina planea trabajar bajo la fórmula de consenso entre los 20 países del grupo, que parece complicarse dada la presencia de Estados Unidos, el único país en rechazar el Acuerdo de París. Para Bergman, es algo que se puede lograr a pesar de la posición del gobierno de Donald Trump, y que también se puede avanzar por fuera del marco de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (UNFCCC por sus siglas en inglés).
“No vamos a confrontar con la posición de Estados Unidos de irse del acuerdo. Estados Unidos rechazó las metas, pero no la reducción de las emisiones y que hay que continuarlas. Es un interlocutor más para la sustentabilidad climática. El lugar de Argentina es los consensos y el diálogo”, afirmó Bergman.
Argentina está en una muy buena posición para impulsar clima en la agenda del G20. Sin embargo, las organizaciones ambientales expresaron sus dudas de que sea sólo un tema más entre muchos otros
La mirada optimista de Bergman fue compartida por Patricia Espinosa, secretaria ejecutiva de la UNFCCC. Consultada por Diálogo Chino, Espinosa dijo que desea que Argentina continúe el liderazgo climático de Alemania en el G20 y se manifestó optimista acerca de esa posibilidad.
“Esperamos y queremos que Argentina tome liderazgo climático en el G20, para así mantener el tema en la agenda del grupo. Soy optimista y sé que es posible”, expresó.
Sin embargo, el camino no será sencillo, de acuerdo a organizaciones de la sociedad civil, las cuales rechazan la fórmula de consenso impulsada por Argentina y piden más claridad en la agenda que tendrá el cambio climático en el G20
Climate Action Network (CAN), una coalición global de organizaciones ambientalistas, publicó en su boletín diario ECO en la COP23 un duro comunicado cuestionando la “incertidumbre” sobre el rol que tendrá el cambio climático en la agenda del G20 bajo la presidencia de Argentina.
Para CAN, Argentina está en una “muy buena posición” para impulsar clima en la agenda del G20. Sin embargo, las organizaciones ambientales expresaron sus dudas de que sea “sólo un tema más entre muchos otros” y cuestionaron las “pocas certezas” del contenido de la agenda de cambio climático en el grupo bajo la presidencia de Argentina.
“Nadie tiene claro cuál va a ser la agenda climática de Argentina en el G20, están evadiendo el tema. Se va a buscar el consenso entre todos los países y eso no es bueno para el clima considerando la posición de Estados Unidos. Se van a terminar sacando temas de la agenda para atender a los caprichos de Trump”, afirmó a Diálogo Chino Enrique Maurtua Konstantinidis, director de Cambio Climático de Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN).
Combustibles fósiles
Uno de los mandatos acordados por el G20 en 2009 fue eliminar los subsidios al petróleo y otros combustibles fósiles en el mediano plazo, sin establecer una meta específica. Para organizaciones ambientales, el objetivo se debería lograr en 2020 o a más tardar 2025.
Sin embargo, poco avance se ha hecho hasta ahora. De acuerdo a un informe de Oil Change International, los países del G20 destinan una financiación pública a los combustibles fósiles cuatro veces superior que a las energías renovables. Argentina no es la excepción, subsidiando no sólo la generación sino también el consumo.
De acuerdo a Bergman, Argentina buscará avanzar en lograr la meta establecida en 2009 y ya ha dado pasos en esa dirección, por ejemplo, fijando el precio de los combustibles de acuerdo a valores internacionales y no domésticos y al impulsar el desarrollo de energías renovables“.
“Esperamos dar después una discusión de fondo sobre los combustibles fósiles. Nadie sensato lo quiere estimular. El combustible fósil tiene costar caro. En algún momento no va a ser más rentable y nosotros tenemos que ayudar a que sea menos rentable”, sostuvo Bergman.
Ambición climática
El hecho de tener la presidencia del G20 también pondrá todas las miradas en las acciones que está realizando Argentina en materia climática, las cuales son todavía insuficientes de acuerdo a Climate Action Tracker, organización que evalúa a los países de acuerdo a sus compromisos.
Argentina revisó en 2016 su antes criticada Contribución Nacionalmente Determinada (NDC) y se comprometió a reducir sus emisiones 18% de manera incondicional y 37% de manera condicional en financiamiento internacional, una mejora de su compromiso previo, pero todavía “altamente insuficiente” de acuerdo a Climate Action Tracker.
Bergman rechaza el diagnóstico y asegura que Argentina actualmente “mitiga todo lo que emite” y destacó que todas las medidas de la NDC fueron validadas. Al mismo tiempo, consideró que su gestión comenzó luego de “años sin política ambiental” durante la administración de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Al mismo tiempo, Maurtua Konstantinidis sostiene que Argentina “puede hacer más” y debería incrementar sus niveles de ambición climática. “No es imposible volver a revisar la NDC ya que con el trabajo que se está haciendo se podrían tener metas más ambiciosas,” sostuvo.